Impotencia

No me gusta esta sensación.
No estoy nada acostumbrada y no me gusta.
No me gusta verte así.
No me gusta no poder hacer nada, sentirme totalmente inútil. Cada vez que veo tus ojos pidiendo ayuda deseo con todo mi corazón poder decir aunque sea una palabra!
Pero no me sale. Es confuso.
A la persona con la que puedo hablar de todo y la que me ayuda siempre aunque no lo pida, no le puedo retribuir nada. Jane, es horrible esta sensación, te lo aseguro; y sabés por qué es? Porque entiendo exactamente como te sentís.
Y todo aquello que vos necesitás que te digan en este momento para hacerte sentir mejor, es lo que yo busco hace años. Lo que ambas buscamos hace años. Y aunque nos tenemos las dos para sentirlo, sufrirlo, llorarlo, largarlo, reirlo, y olvidarlo juntas, no es suficiente. Y como me gustaría que lo fuera.
Cómo me gustaría que pudieras olvidar todo aquello que te desvela, te paraliza, te obstaculiza el presente. Y cómo me gustaría poder decirte las palabras que necesitás escuchar. Pero lo único que puedo hacer es ofrecerte mi hombro. Sé que es poco, más que poco. Pero espero que entiendas, yo sé que vas a entender. Entender que verte tan desamparada me pone más triste que lo que puedo imaginar y ver que soy inútil frente a esto me causa muchísima pero muchísima impotencia.
Sin embargo, en el fondo sé que un abrazo ayuda. Que alguien que te entienda ayuda. Lo sé porque te tengo a vos para demostrármelo día a día y para enseñarme cómo es una amiga verdadera.
La fuerza para superar esto te va a salir de adentro, porque sos muy fuerte, aunque vos no lo pienses así. Y la gente que te rodea, a pesar de los malos y chiquitos momentos, siempre te va a acompañar y te va a brindar su apoyo.
Ojala pudiera hacer más corazón. Desde adentro mío mando toda la fuerza para que vos y yo podamos dejar de pensar, por más duro que suene...
Quiero que sepas sobre todo que no estás sola. Siempre voy a estar al lado tuyo, cueste lo que cueste.